Pero vamos paso a paso. Quedamos en como surgió la idea, pero no como siguió. Un amigo de Nati, compañero de portugués, y conocidos de él también estaban pensando en ir a Nueva Zelanda. Y así fue como se unió el tercer mosquetero, Agustín Sakugawa.
Una tarde en el shopping Devoto, y lo que surgió como idea empezó a tomar forma de proyecto. Ya teníamos un equipo para juntar información y ver como realmente era la situación. Algunos planeando irse al mes siguiente, y otros en tiempo indeterminado. Pero todos en lo mismo.
Teníamos una primera barrera, que era la que determinaba si podíamos viajar o no: La visa. La visa es el permiso de estadía y trabajo que necesitamos para poder entrar en Nueva Zelanda.
Con fecha determinada de lanzamiento, teníamos una sola chance para aplicar a la Visa. Rogar que el sistema no colapsara, y ser más rápido que los otros miles de personas que querían conseguirla era nuestra única oportunidad.
Con algunas estrategias en mente, y más miedos que certezas, llegó el día. Eran las 6 pm, faltaba media hora para que abrieran las aplicaciones para la Visa Work & Travel. Yo me encontraba corriendo a velocidad "te corre un chorro para sacarte la billetera y vos justo sacaste la mitad de tu sueldo del cajero" hacia el subte, y Nati histérica en el trabajo.
Nati no iba a sacar la visa al mismo tiempo que nosotros, ya que al tener el pasaporte italiano, ella tenía la posibilidad de sacarla en cualquier momento del año y sin límite de lugares. Así que esa tarde estaba de lleno para ayudarme a mí.
Para el momento en que llegué a casa Nati no había podido avanzar aún nada. El terror ya me había invadido. Los chicos que se fueron el año pasado ya nos habían contado lo difícil que era conseguirla, pero también dijeron que teníamos que tener paciencia, ya que llevaba tiempo. A la media hora yo ya había podido llenar los formularios y enviar el pago, el cual es el último paso. Confieso que unas lágrimas se me escaparon. Lo más difícil ya había pasado. Al poco tiempo Agustín también la consiguió, y así ya estábamos en camino.
Quedó todo algo colgado después. La idea era irnos por Abril mas o menos...habiendo yo ya rendido las materias que me quedaban para recibirme y eso. Pero la cornuda facultad salió de pronto con que tenia que pagar como $4000 para rendir las materias...y obviamente si pagaba, quedaba muy corto para irme. Asi que tuve que aplazar el viaje hasta mínimo Junio, hasta poder resolver ese asunto y rendir en el próximo llamado.
No sólo eso, la ola de terremotos y Tsunamis en Japón tuvo una repercusión en NZ. Todos escucharon del terremoto de Christchurch, una de las sedes del Mundial de Rugby. Pero a ninguno de los 3 se nos ocurrío jamás cancelar el viaje (a pesar de las dudas de nuestros viejos por supuesto).
Agus y Nati ya sacaron pasajes. ¡El 4 de Mayo están partiendo hacia NZ! Yo por mi parte va a ser después de las fechas de los finales, en Junio.
Pero a Agus se le ocurrió una idea genial, hacer un curso de barman e ir con un título de algo allá. ¡Sublime!
Nos anotamos rápido y empezamos la semana siguiente...ya casi terminando el curso y cerca de la fecha del viaje, las ansiedades no son las mismas ni las expectativas tampoco.
A mi solo me resta solucionar algunos problemas de salud, y ya estoy listo para irme.
Tenemos un sueño al alcance de la mano y no vamos a dejarlo ir ;)
Falta nada, cada vez menos...
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| Dos de los futuros barman (el tercero está en viaje a Mar del Plata) |
